No. 3.- UN VIAJE POR EL AMOR...

El comportamiento humano puede ser tan errático y a la vez tan intencionado, si somos seres de sentimientos donde el corazón gana a la razón, entonces el actuar queda plenamente justificado. En esta ocasión, me permitiré llevarles de la mano por un recorrido de ese sentimiento tan especial como lo es el amor.... ahahahahahaha..... no soy investigador, pero por el simple  hecho de estar en este mundo, de ser graduado con mención honorífica de la universidad de la vida, me son razones suficientes para considerarme calificado y sacar a la luz mis más realistas conclusiones, solo les pediré, que sin miedo, dejen que sus sentimientos lleguen a flor de piel y disfruten  este pequeño y sencillo viaje.

En el transcurso de nuestra vida vamos viendo que el amor no es como lo pintan, cada etapa de la vida nos da una cara del amor, no es el mismo siempre aunque la esencia si lo sea, es como las medicinas, la sal es la misma pero el nombre comercial cambia, bueno la idea es esa, de niños como de preescolar, no entendemos lo que nos pasa, odiamos a las niñas y pensamos que el mundo seria mejor sin ellas, disfrutamos estar con los amiguitos y creemos que ese bienestar nunca debe terminar, con todo respeto, no sabemos si somos hombre, mujer o quimera, lo habían pensado? O acaso pasaron de ojos cerrados por la infancia? En la primaria nuestro odio se acrecenta, reafirmamos la amistad con los cuates y creemos que será para toda la vida, eso se llama amor de amigos, juramos amistad eterna, que pase lo que pase donde quiera que estemos jamás nos olvidaremos, juramos amor de amigo hasta la eternidad, como en el matrimonio, sin embargo con los años, simplemente nos “divorciamos” de los amigos, no volvemos a vernos aunque en uno quede ese sentimiento o deseo de volver a encontrarnos como lo juramos y cuando eso sucede nos llevamos un: “No me acuerdo, tengo mala memoria, quizá si te conocí pero no te ubico...” el comportamiento humano es tan errático, como ya había dicho... pero bueno, quizá en mi época que no se si será la suya, por que ahora los niños desde preescolar ya te dicen : Papá, ya tengo novia!! Como si fuera tener calcomanías o carritos, que sucede???? 

Eso es tema de otro momento, retomo (salud!!!) mi cauce, decía que en mi época de la primaria empezabas a sentir algo raro al ver a las niñas, educadora o maestra, sobre todo si las 2 ultimas eran jóvenes, que no sabias que pasaba, como que ese pacto entre niños de odiamos a las mujeres iba cambiando y sentías traicionarlo al tener ese sentimiento de ver bien a quien ya no te parecía que había que odiarla y sin darnos cuenta zas!!! Nace el amor escolar, pero para no sentir culpa de ello, iba uno con su mejor amigo y como no queriendo la cosa le decías: “Como que fulanita es buena onda con nosotros, no crees? Como que eso de odiarla no esta bien, es niña y merece nuestro respeto” pero la realidad era que esperabas que el amigo dijera: “Tienes razón” y listo, la culpa desaparecía y  uno estaba mas tranquilo por que ya era posible sentir, lo que sentías, sin culpa, podía uno soñar sin remordimiento, no se ustedes pero yo siempre tuve una imaginación maravillosa!!! Pensaba como seria hablar con ella, decirle que me gustaba y como ella me aceptaría, como seria nuestra vida juntos... mmmm maré creo que era medio precoz, no creen? Pero bueno, así era la cosa del amor, recuerdo que en cuarto año un día llegue a casa y le dije a mi madre que me gustaba una niña de la escuela, mi madre me observo calculadoramente así como solo ven las madres que creen perder a su retoño y me dijo: “Hijo, no crees que estas muy chico para pensar en eso?” Yo dije tímidamente: “Pero me gusta ma” Sabiamente mi madre completo: “Aun les falta mucho por delante, pero para decidir algo así seria bueno que conocieras a su mamá, así podrás tener una idea de cómo será ella?” Cuando eso sucedió.... sentí que el amor me había hecho una mala jugada...

Pero bueno, la vida continua y llega uno a la secundaria, donde la mujer ha madurado mucho mas que nosotros que aun estamos medio verdes y “pubertos”, bueno no todos, pero si la mayoría, a poco no pasa que siempre tenemos un amigo que se las sabe de todas todas, es el carita de la escuela, el yo las puedo y todas las chicas quieren con él, aunque sea repetidor (condición que hoy creo lo favorecía)   por que son así las mujeres? Por que nos discriminan? Solo por que uno era medio gordito, con la cara grasosa y llena de granos? Que poca!!!!! Es la época en que comienza uno a interactuar de forma mas intencionada con las mujeres, descubrimos que no van a comernos, que si las tratas con respeto y es uno atento, ellas te reconocen y tienen preferencia por uno, así la cosa ya cambia: la acompañas a la salida, llegas a su casa, te regala el vaso de agua y sientes que eres dueño del mundo, renace la llama del amor apagado (amor de  púber) y con gran emoción llega uno de nuevo a casa con mamá: “Madre!!! He conocido a la mujer mas bella, única, inteligente, encantadora que hay sobre la tierra!!!” ya empieza uno a ser medio poeta por la magia del amor.... y mi madre con toda su ternura y mirada de Libertad Lamarque, expresa: “hay hijo, pero si a esta edad las niñas parecemos ratoncitos lavados” y me veo caer en cámara lenta de espaldas como en matrix... al otro día observo a la ratoncita y ya no me parece tan bella y encantadora, mas uno agradece las atenciones que prodiga, sin percatarnos de la obscura y deliciosa intención.

La madre naturaleza hace su labor y aquella ratoncita va teniendo lindas formas que llaman poderosamente nuestra atención, así que bajo la ilusa idea de que nos tiene aprecio y distinción, nos acercamos tan solo para descubrir que su interés esta depositado en ese chico de preparatoria que la verdad sea dicha, se ve mejor vestido, que uno que usa un horrible uniforme con el que todos parecemos el mismo, solo nos queda esperar y desear llegar a la prepa.

El ansiado momento ha llegado, la preparatoria, un mundo nuevo donde pudimos crecer y desarrollarnos, caras nuevas, amigos nuevos, “ratoncitas” nuevas, descubrimos que la música juega un papel importante en esta etapa del amor de prepa, pero sobretodo los boleros y las serenatas, la magia de una serenata solo la mujer puede explicarla, pero lo que si se, es que el bolero tiene historias que inexplicablemente expresan lo que sentimos en esa  y todas las subsecuentes etapas de la vida.

Cuando nace el deseo de ser y estar con alguien no hay poder humano que pueda reprimirlo, mas que uno mismo, (mi respeto a quien puede hacerlo) pareciera fácil mas no lo es, ya lo han dicho los grandes autores del bolero mexicano donde el pecado se manifiesta en forma sutil, amable y hasta antojable, como en estas hermosas líneas: “Mírame, con el deseo ardiente de pecar y bésame, que sangren nuestros labios al besar, júrame, que aunque el mundo me juzgue, que aunque todos me acusen, tú me perdonaras.”

Lo anterior puede llevarnos en una montaña rusa de aventuras y desventuras, el primer amor verdadero (los anteriores fueron ensayos?)  donde los sentimientos se agolpan y nos llenan de emoción, de mariposas en el estomago y de esa impaciencia nerviosismo que nos invade justo un instante antes de verla, que mejor manera de describir este mar de sentimientos... “... que por que te estoy queriendo, no me pidas la razón, que yo mismo no lo entiendo en mi propio corazón, al llegar la madrugada mi canción desesperada te dará la explicación ...” y así , sin mas ni mas soñamos y deseamos que nunca termine, pero bien dicen que la física no se equivoca, a toda acción corresponde una reacción igual y en sentido inverso o lo que es lo mismo,  la decepción: “Yo tuve un amor y me traiciono, dejándome en el alma, una desilusión, tuve de aquel amor una amarga impresión...” pero, la decepción no dura mucho, puedes lloriquear cuando nadie te ve y antes de que estés a punto del colapso sucede.... “...y de casualidad te presentaste tú, tú mi segundo amor, fue quien vino a borrar, esa duda constante que yo tenia, culpa de aquel amor en quien yo creía....”  y poco a poco vamos descubriendo que no existe sentimiento mas puro que el amor...
de madre... (continuara algún día...)